Una lanza al rojo vivo traspasándome de parte a parte me haría mucho menos daño.
Mirando sus ojos siento un vertigo mayor que el de estar al borde de un abismo insondable.
No puedo hacer nada salvo estar lo más cerca posible en todo momento.
sábado, diciembre 16, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
2 comentarios:
Caray. Aparte de un inútil "sé lo que se siente" no sé qué más decirte.
Zanks.
De momento estoy anestesiado a base de trabajo, a la espera de que saquen las esquirlas de metralla, que me da que para entonces la anestesia se habrá evaporado jeje
Pero bueno, más o menos disfruto con la cantidad de frikadas que nos llegan todos los días ;-)
Publicar un comentario