miércoles, marzo 29, 2006

Alkaendra, los sueños perdidos... JdR

Una de homenaje.
Había una vez unos chicos muy majos de allende los hierbajos verdes y las montañas troscas (osea, las Asturias) que decidieron garabatear y publicar esos desvarios de sus partidas de rol. Y se comieron el tarro que te pasas y crearon un universo multietnico como a ningún diseñador yankee se le hubiese ocurrido (si es que de donde no hay...). Además tenían a un "pinturillas" que se curraba unas cosas mazo chulas y otro era geólogo, asín que la geografía y tal estaba como muy realista.
Y se buscaron la manera de publicarlo, y lo consiguieron, y les salió un libro la mar de bonito y de barato y empezaron a presentarlo de manera bastánte atípica: se pasaron por tres clubes por provincia presentando directamente el juego a la peña. Y la cosa pintaba muy muy bien.
Y llegaron las CLN de Granada (eso era el 2002), y se pusieron a enseñarlo, y tenían también un juego de tablero tipo diplomático que era la repera, y otro de combates singulares con quecos, y sacaron el número cero de la revista "todo complemento" del juego que te regalaban cuando lo comprabas, y allí recibieron un galardón por la mejor iniciativa empresarial al destinar parte de los fondos de las ventas al apadrinamiento de niños en el tercer mundo...

Y entonces, ¿porqué no es mundialmente famoso? ¿porqué no tiene mil y un complementos? ¿porqué no siguieron adelante?...
Pues porque "los listos de las listas" (las listas de correo), sobre todo los "mamporreros" de cierta agonizante editorial-distribuidora decidieron cargárselo de la peor manera posible.
En ese tiempo las escaramuzas en lo empresarial en el eje Madrid-Sevilla-Barcelona estaba en el clímax: unos poniendo a parir a otros frente a licenciatarios, cerrando el paso a traducciones con vaguedades legalistas, traduciendo a toda máquina juegos con igual temática, pero de peor calidad para ver si le estropean el mercado, y todos usando los púlpitos digitales para tirarse los trastos a la cabeza...
Y claro, estos chicos, que sabían muy bien donde pisaban, apostaron por la mejor distribuidora (la única a día de hoy), y que parecía que estaba a salvo de las ordinarieces habituales. Pero entonces algunos decidieron que darle cancha a un juego de factura española podría ser contraproducente para su negocio de "traduzco un básico y me hincho a avender complementos en inglés que me dejan mucho margen y no tengo que pagar a nadie, aunque luego se muera la línea quemeimportanamiloscompradoressisonniñatosalosquetimarcomoquiero", no fuese que en el extranjero (Francia sobre todo) les diese por buscar a creativos españoles y les diesen lo que les corresponde por licenciar cosas hechas aquí y de repente ellos se viesen al margen del negocio... Hacían correr rumorología en listas generalistas, decían a "tenderos" que aquello era un asco, etc, etc.
Y claro, los problemas económicos derivados de no vender lo suficiente acabaron con broncas en el equipo (a eso de "querer es poder" hay que añadirle el "...si te dejan", que hay demasiada gente a la que no le interesa que saques la cabeza). Y entonces el juego no continuó.

Ahora uno de los diseñadores lo ha colgado en la mula, junto con todo lo publicado y en la lista de correo está un montón de material añadido que se fue gestando mientras el juego estaba en vigor. Para más información http://www.ociojoven.com/article/articleview/93855/Alkaendra y también en http://www.inforol.com/foros/viewtopic.php?t=2235 y si a alguien le interesa esta obra de arte rolera española llevada al barranco por los mediocres de siempre, aqui estoy para contestar lo que sea menester.

lunes, marzo 13, 2006

Libros, libros, libros...

Pues hala, ahora para variar, una entrada no agresiva o criticona je, je, je... sobre todo después de disfrutar como un enano con el Gran Premio de Bahrein de Formula 1, aunque llevase veintisiete horas sin dormir y aguantar otras trece más igual (algunas mujeres tienen el don de hacer que cometamos todo tipo de locuras y este fin de semana tres de ellas provocaron esas locuras de manera consecutiva...)

¡¡Me he quedado sin lectura!! Ese fue el agónico pensamiento que me asaltó el otro día cuando cerré el último volumen y recorrí mis estanterías en busca de algún tomo que mereciese la pena releer. Y es que todo lo que tengo ya lo he devorado más de una vez (solo de los que pueden aportar algo con repasos, que ya sabemos que hay demasiada letra impresa destinada de inmediato al olvido tras el punto final).

Lo último ha sido “Trafalgar” de Benito Pérez Galdós, y la verdad es que ando de un sediento de lectura que los artículos de revistas históricas, los análisis político-estratégicos y las reseñas científicas y de investigación periodística no consiguen saciar.

Espero que lo que me anunciaron el viernes que ocurriría este martes se materialice (en parte) con ese objeto delicioso y que sospecho será la última obra de Pérez-Reverte. Aunque igual de bien estarían los tomos de Patric O’brian y su capitán Aubrey a partir del X, o algo de Chomsky, o los tres primeros tomos de la hexalogía de Dune (los míos se desintegraron hace tres años en una inundación de trastero), o la obra completa de Brian Aldiss “Heliconia", o lo publicado hasta ahora de “Juego de Tronos”...
Bueno, que ya veremos lo que depara la semana en cuando a encuadernaciones devorables.

sábado, marzo 11, 2006

Comienza el Circo

Un año más el "Circo", el de la Formula 1 comienza.
Cambios en reglamentación, nueva forma de clasificar, vuelta a los cambios de neumáticos por doquier, motores menos potentes, nuevas escuderías (22 coches en parrilla...), suficientes ingredientes para interesar a los que se añaden el baile de pilotos entre equipos y el estreno de "novatos" (entre ellos el hijo de un gran campeón Niko Rosberg).
Y algunas incognitas empezarán a ser desveladas, y no me refiero a prestaciones de los monoplazas, agresividad de los pilotos, o estreno de los equipos.
Me refiero a si seguirá habiendo prensa "traidora" que seguirá ignorando o crucificando al piloto campeón del mundo más joven de la historia de la Formula 1, al único español que lo ha conseguido (la prensa alemana hace piña con los pilotos alemanes, lo mismo que la británica, la finlandesa, la colombiana o la brasileña con sus pilotos patrios... menos aquí) o descalificando como "moda" algo que en España tiene una enorme tradición e interés como es el mundo del motor, aunque sienpre haya sido silenciado.
Y es que determinados medios, en manos de los oligarcas de lo inmobiliario-futbolero, tienen una obsesión totalitaria que va más allá de la simple defensa del negocio. Se dedican a menospreciar todo lo que no sea furbol. ¿Será que la F-1 tiene alguna más complicación en el entendimiento que lo otro? ¿será que ellos no sacan "tajada" porque no ven más allá de sus narices en cuestión inversionista?
En fin, que a pesar de que los mass-media televisivos han rebajado su agresividad, los radiados e impresos siguen en sus trece... y la gente les va dando la espalda poco a poco hasta quedar al descubiero la verdadera naturaleza de esos atrincherados en actitudes dignas de elogio por los garantes del antiguo régimen.

martes, marzo 07, 2006

MEDIOCRES

Pues si. Ya se que es una ovbiedad como la copa de un pino, pero resulta que el mundo está lleno de serecillos cutres y casposos a los que les encanta cortarte el paso y dejarte en la cuneta con cara de tonto a veces, y a veces con cara de muy pocos amigos. O ninguno.
Se les distingue enseguida porque son aquellos cuyas frases habituales están llenas de "... en la ventanilla de al lado...", "... vuelva usted mañana...", "... de eso no tenemos (y está delante, claro)...", etc, etc, etc.
También se les puede distinguir porque son esos a los que se les llena la boca con la "corrección política" en aras del "buen rollito", espantándose ante terminos ligeramente gruesos o críticas un poco más duras de lo normal. Habitualmente no son más que seres melífluos, falsos, hipócritas y cobardes, incapaces de hacer con sus propias manos lo que debe ser hecho, no sea que "el jefe" se fije demasiado en su evidente inutilidad y decida prescindir de ellos.
La mayoría son fácilmente esquivables cambiando de establecimiento, horario o ejerciendo "zaping", lo cual nos permite borrarlo de nuestra existencia en breves instantes (¿los instantes pueden ser prolongados?). Pero existe un subtipo de mediocres terriblemente peligroso y que, en su mayoría, son los directos responsables de que el mundo no funcione como debiera: son los que ocupan puestos inetermedios o directivos.
Esos que, de ser "negros" acongojados como todo el mundo, pasan a un puesto superior por arte de birli birloque (quizás una sustitución, un reajuste de plantilla o cosas más o menos providenciales, porque a esta gente lo de trepa y aleta dorsal les suena a chino), y de repente se encuentran con que deben tomar decisiones más o menos importantes.
Y ahí es donde se arma el pifostio. Porque de repente lo que en la empresa, administración o entidad funcionaba con cierta fluidez, comienza a atascarse, retrasarse, rechazarse, silenciarse o directamente ignorarse.
Y claro, cuando el tipo (o tipa, que en esto los sexos y las razas no son óbice) es el encargado de supervisar nuevas adquisiciones o trabajos ajenos la cosa ya pasa a ser surrealista. Lo que análisis objetivos por parte de autoridades en la materia dan como bueno, estos tipos se lo despachan con tal desparpajo que uno a veces se piensa si es que están imbuidos de una clarividencia cuasidivina y no nos hemos dado cuenta de los errores, o es que te tienen cruzado.
Pero resulta que la explicación más sencilla es la válida: son tontos de capirote. Y he aquí que al darse cuenta uno de tal circunstancia, pues va e insiste (de buenas maneras oiga), pero el tipo lo ignora. Y entonces uno dice que ya está bien y vuelve a la carga. Es ahí donde la liamos, porque, además de ponerte en el punto de mira, el muy inutil va y se pone a cerrarte el paso despotricando en otros lugares donde aún no saben nada de ti, pero podrían tenerte en cuenta.
A esta gente les convendría pasarse una temporadita en un lugar conflictivo de verdad (ya que se acabó la mili, hay que buscarles sustitutos tanto o más didácticos), pero sin guía turístico, movil, tarjetita de crédito ni diccionario de idiomas. A ver que tal lo pasaban.

lunes, marzo 06, 2006

Toc toc toc...
¿Oigaaaa... ? ¿hay alguien por ahí...?
Ñiiieeeeeeeeeek (bisagras oxidadas claro)...
Puaj, cuanto polvo y telarañas...
Plas, plas, plas... cof cof... hala majas, a jugar a pala (a las arañas)...

Un año.
Pues si, hace un año (menos dos días) de la última entrada en este espacio. Me sorprendería que alguien siga pasándose por estos lares. Quizá haya algún alma caritativa y tal, pero seguro que tiene mejores cosas que hacer que aburrirse viendo la no-actividad de este lugar.
La periodicidad que pueda tener en este reestreno no es previsible. Osea que parafraseando a un colega “tendrá periodicidad aleatoria”. Y es que esta vez buscaré temas que me interesen de verdad para traducirlo a letras públicas.

Últimamente he visto, oído y leído cosas que se me antojan curiosas (como que no pasan cosas en un año ni nada, je).
En días oscuros (de ánimo) me da la impresión viendo las noticias de que nos encaminamos hacia un holocausto. Y no sé de quien llegará antes, si de la incompetencia (habitual) de los dirigentes yankees y su previsible bombardeo estratégico sobre instalaciones tecnológicas de la republica islámica de Irán, o de la incompetencia (habitual) de las autoridades político-sanitarias a la hora de contener el previsible salto de especies del mortífero H5N1. Quizá esto último sea lo más peligroso (por repercusión a todos los niveles y estratos sociales, que como no vivas en una burbuja ya me dirás tú como lo evitas), ya que los efectos de un bombardeo “quirúrgico” en Irán podrían “contenerse” en el escenario estratégico del Golfo Pérsico (claro que a los habitantes de la zona maldita sea la gracia que les hará) y a nosotros se nos traducirá en la habitual escalada de precios de los derivados del crudo, llamamientos a la crisis, etc, etc.
En otros días me parece que las conquistas humanas en todos los campos científicos, a pesar de los habituales oscurantistas que estarían encantados con la resurrección de refinadas artes (potro y auto de fe de por medio) y sus acólitos cantamañanas ejerciendo hipocresía desde teclados de última generación (no nos engañemos, a estas alturas póngaseme al lado de los evolucionistas y en contra de los creacionistas... a todos los niveles), nos depara buenas cosas... siempre y cuando no quede en manos de unos pocos (entiéndase como pocos no una clara y evidente elite dirigente, sino un área específica que se llama “zona económicamente viable” o más conocido como “países desarrollados”), y es que uno todavía puede llegar a creer en futuribles mas mejores.

En otro orden, así, como más cerca, país, comunidad, ciudad, tampoco andamos mancos con cosas varias (en política no me meto que bastante dolor de cabeza nos dan todos a todas horas), aunque lo que más gracia me hace (es un decir) es esa manía de algunos, o de muchos, de echar la culpa de todo al gobierno (sea el que sea). Ya sabes, como el chiste de Mafalda aquel en el que ¿Carlitos? no sabía discernir aún de responsabilidades y del calor que padecía se preguntaba si era culpa del gobierno... Pues eso, que si nieva, nieva. Que si llueve, llueve. Y no nos olvidemos del viento, que si sopla de un lado no nos valla a traer actitudes y cosas perniciosas, como si los pensamientos fuesen esporas... Uno se pregunta dónde anda metida la gente para hacer esas reclamaciones gilipuertas y esas afirmaciones insostenibles.
Aunque en cuestiones de paraguas y bufandas uno se queda un poco mosca cuando indaga sobre el programa HAARP y en los diarios gratuitos lee en portada y doble página sobre empresas que modifican la climatología a gusto del cliente (y el mejor cliente un gobierno, y no el departamento de agricultura precisamente...).

Aunque lo más cercano es, como siempre, las personas que conoces. Y a pesar de que crees que las conoces, aún siguen sorprendiéndote. Todos tenemos nuestras tendencias y hábitos y no hay muchas personas que sean capaces de tolerar según que cosas. Todos nos equivocamos, por supuesto. En algunas ocasiones ni nos damos cuenta y las personas que nos lo hacen notar a veces no se expresan con la suficiente claridad, de ahí malentendidos que pueden convertirse en torvos asuntos, o surgen terceras personas expertas en sepelios y cirios ajenos dignas de aparecer en un “reallity-show” de esos.
Pero la que me sigue sorprendiendo es esa gente que asume que los demás tienen que ser expertos videntes, o como poco perfectos telépatas, capaces de interpretar todos y cada uno, no de sus gestos o palabras no, sino cada uno de sus pensamientos e intenciones. Luego están las que, por razones que se me escapan, tratan de que todos se comporten y asuman unas actitudes concretas que desde su punto de vista son “lo correcto”, despellejándolas en círculos privados (o públicos, según la ocasión) si no se amoldan a lo que dictan (creo que estas actitudes en política tienen un nombre... y en psiquiatría también)... ¿Tan difícil es el arte de vivir y dejar vivir que hay que estar mirando a ver que hacen otros para poder justificar tendencias, actitudes o pensamientos? ¿No tenemos cada uno suficiente con lo que nos toca? Si además son gente de la que no se tiene la menor intención de tratar ni siquiera superficialmente, no digo ya aprender (aunque hasta de lo malo...), creo que, humilde opinión, es mejor dedicarse a cosas que se crean más fructíferas. Aunque me temo que algunos creen como fructífero la ruina de otros. Al telediario me remito.